La idea de los transportistas es limitar el número de carreteras y kilómetros afectados para poder analizar su evolución y actuar en función de los resultados.
La Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) propondrá al Ministerio de Fomento un plan experimental inicial para el desvío de vehículos de transporte pesados a las autopistas de peaje, como alternativa al impulsado por el Ejecutivo.
La idea es limitar a un menor número de tramos las carreteras nacionales afectadas, con el fin de analizar su evolución, y en función del resultado ampliarlo a un mayor número de carreteras.
Del mismo modo, esta medida debería basarse en el carácter voluntario de la utilización de las autopistas, para lo que se hace necesario que el Ministerio apueste por una intensificación de los descuentos a aplicar en los peajes, con el fin de que estos resulten más atractivos para los transportistas.
Esta iniciativa ha sido acordada por los miembros de la Federación en Asamblea General, reunión en la que han reiterado su rechazo tanto a la obligatoriedad del proyecto de Fomento como a “la injustificada celeridad” en aprobar de forma precipitada la propuesta.
Así, teniendo en cuenta que la medida afectaría a más de diez millones de servicios de transporte por carretera anuales, tanto de corto como de largo recorrido, los transportistas sostienen que la misma requiere ser analizada con profundidad, estudiando el impacto y repercusión que cada uno de los tramos de carreteras propuestos tendría en los servicios de transporte afectados.